Vuelve la primitiva Virgen de la Cabeza a Baena

22/06/2016

Retomamos la actividad en el blog cofrade de Velas Ridaura con una esperanzadora y alegre noticia. La cofradía de la Virgen de la Cabeza de Baena ha recuperado la imagen original en torno a cuyo culto se fraguó la institución. La presentación oficial tuvo lugar hace unos días en un emotivo acto en el que se expuso al público la antiguamente venerada imagen. Una talla de gran valor que ha estado custodiada por una familia de la localidad durante las últimas décadas.

Según los investigadores con los que ha tenido en suerte contar la cofradía, la imagen de Nuestra Señora data del siglo XVIII. Concretamente se sitúa, como fecha más probable, en el año 1700 la creación de la bella obra. Fue por entonces cuando se inició el culto a la Virgen de la Cabeza en Baena. Un culto que duró varias décadas y se interrumpió durante un dilatado periodo de tiempo, pero que en 1984 se volvió a fraguar al amparo de la imagen.

La talla responde a una imagen de candelero; siendo similar a otras imágenes de la Virgen de la Cabeza erigidas en la época correspondiente al siglo XVIII. La cofradía recupera así una tradición ligada a sus orígenes, lo que es motivo de felicitación.

Originariamente esta imagen de la Virgen de la Cabeza era trasladada en peregrinación desde Andújar -localidad de la que es patrona Nuestra Señora de la Cabeza-, hasta la villa de Baena, donde recibía culto y era protagonista de fiestas locales. En la actualidad la cofradía quiere recuperar el culto a la imagen, sin que hayan trascendido las intenciones de la asociación religiosa, que incrementa considerablemente su valor patrimonial con la primitiva talla de la corporación.

La nueva etapa de la imagen está asociada a su nueva ubicación en la iglesia de Auxiliar, si bien no se corresponde con el emplazamiento original, situado en la iglesia de Guadalupe. Fueron las obras en la capilla del Santo Sepulcro las que motivaron el traslado de la imagen a la guardia y custodia de una familia de la localidad, que la ha conservado y venerado en su domicilio hasta ahora, cuando vuelve a manos de la cofradía de Baena.