Proteger los pasos e imágenes de la lluvia con una urna de cristal

Es indiferente que el año sea de sequía, llegando la Semana Santa la amenaza de lluvia se cierne sobre las salidas procesionales de hermandades y cofradías de toda España. Para evitar que la lluvia impida la salida de los pasos y dañen a las preciadas imágenes que portan, una empresa de Jerez ha ideado una urna de metacrilato capaz de resistir tempestades y proteger a las imágenes, permitiendo que podamos seguir viéndolas.

La idea surgió entre un grupo de empresarios cofrades reunidos bajo el nombre e Mascofrade, una empresa dedicada a prestar servicios tecnológicos a las hermandades. Con la invención Meteo23, como se llama la urna de metacrilato, logran dar respuesta a un problema acuciante en la Semana Santa: la lluvia. Algo que ellos mismos han vivido en su condición de cofrades, cargadores y penitentes de varias hermandades.

El ingenio consiste en una urna de metacrilato transparente sostenida por una estructura de aluminio. No está permanentemente instalada desde el inicio de la salida procesional, sino que las hermandades las pueden llevar en un carro integrado en el cortejo, como el carro donde se transportan las velas de los penitentes.

Este sistema se instala en diez minutos como máximo, según sus responsables, que indican que son necesarias entre 6 y 8 personas a las que ellos mismos se ocupan de dar una formación mínima de dos horas. Con estos conocimientos, y ante la amenaza de lluvia, cualquier cofradía puede interrumpir momentáneamente la procesión, y en el tiempo que dura una parada de descanso instalar la urna.

La urna de metacrilato pesa unos 70 kilos de media. Se hace a medida, adaptándose a cada paso y es totalmente segura. Según la empresa que la ha inventado, ha superado una prueba de viento en túnel, manteniéndose en perfecto estado tras someterla a rachas de viento de 120 kilómetros por hora. Pero no solo protege del viento. El principal aliciente es que protege de la lluvia.

Al ser transparente puede instalarse sobre cualquier paso, protegiendo las imágenes y enseres del paso, al tiempo que no impide la visión.

Son varias las hermandades y cofradías de todo el territorio nacional que se han interesado por el ingenio, desde la propia ciudad donde se ha desarrollado, Jerez, a las hermandades de Sevilla, Málaga, Salamanca, Valladolid y varias decenas de localidades más.

Bajo la cúpula de metacrilato se puede proteger desde un paso de palio a un gran misterio. La fabricación es a medida, lo que hace que se encarezca el precio, aunque en boca de uno de sus representantes, “en esto somos más cofrades que empresarios”. La urna tiene un precio entre 5000 y 15000 euros, dependiendo de las características y tamaño del paso, aunque se garantiza la total protección contra los daños causados por la lluvia en los adornos, terciopelos e imágenes que se resguardan bajo ella.

Innovando para la Semana Santa

A esta empresa jerezana le ocurre como a Velas Ridaura, que siempre buscamos los productos más adecuados para las hermandades y cofradías. Ellos llevan varios años desarrollando soluciones adaptadas al mundo cofrade, con base tecnológica, como escaneo de imágenes en 3D, desarrollo de aplicaciones móviles, restauración patrimonial y otros tantos servicios útiles para la puesta en valor del patrimonio cofrade.